Iba a ser la mejor Premier League de todos los tiempos. La sobredosis de morbo centraba la nueva Meca del futbol en Manchester. Varios vendieron su alma con tal de alquilar un balcón en la sombría ciudad británica, convertida tras el agitado verano en epicentro balompédico.
Los dardos envenenados de José Mourinho pondrían otra vez a prueba la estabilidad emocional de Josep Guardiola. El United al fin tenía un entrenador del tamaño de Sir Alex Ferguson y el City… el City había contratado a un técnico con el rigor táctico necesario para aplastar a la blanda competencia inglesa. Para evitarlo, el portugués se trajo consigo a Zlatan Ibrahimovic, el enemigo íntimo número dos del entrenador catalán.
Cierto es que los entrenadores, por buenos y polémicos que resulten no juegan y por ello, Manchester City fue por segundo año consecutivo el equipo del mundo que más invirtió en reforzar su plantel. El siguiente en la lista -¿quién si no?- Manchester United.
Y resulta que hoy Manchester es más gris que nunca. Ni fría, ni caliente. Ni limpia, ni sucia. Mourinho es el técnico con el porcentaje de victorias más bajo que ha tenido el club en más de 40 años. Guardiola en tanto, se ha dado el lujo de bajar el listón heredado por el presunto bueno para nada de Manuel Pellegrini.
La que iba a ser la Premier League más apasionante de la historia es un paseo en el parque para el tercero en discordia. Como pueden intuir, éste no es el Arsenal que este año despilfarró como nunca para frustrarse algo más que siempre. Tampoco el Liverpool, en el primer año completo del carismático y seductor Jurgen Klopp, ha dejado de ser pan con lo mismo.
El Chelsea acabó en décimo lugar la nauseabunda campaña pasada. Sin embargo, concedió que 13 clubes ingleses invirtieran más que ellos en reestructurar sus planteles para esta temporada.
Pronto demostró que saber vender es tan importante como saber comprar. Que es factible traer a un técnico de fuera y salir campeón al primer intento. Que puedes ser el mejor sin ser el más seguido de la capital. E incluso que vestir de azul no es impedimento alguno para cumplir tus sueños.
Máquina sin patas, te estoy hablando a ti… ¿Me estás oyendo, inútil?