Uvas, paseos, propósitos, regalos, alcohol, mucho alcohol y un año nuevo que sin darnos cuenta ya entró al quinto día. Es hora de reconectarnos, prender la tele y recuperar el tiempo perdido. Pero entre todo el universo deportivo solo la NFL y la Premier League nos despachan como creemos merecernos.
Todo mundo habla maravillas de la liga inglesa. Aluden a su Fair Play, a su organización, a sus estadios siempre llenos, a la espectacularidad de su juego y al nivel de sus principales clubes. Sin embargo, les resulta más cómodo escribir algo del Interlingua… cof cof, quise decir Interliga… y ya cuando se ponen atrevidos, abordan el futbol internacional siempre anclados en los puertos Madrid o Barcelona.
Para algunos, el interés de la Premier radica en algo más que los minutos que Vela, Guille y Gio se pasen en la banca. Pero ni la empresa que tiene los derechos de transmisión en México valora la joya que tiene en sus manos, y pone a comentar sus partidos a lo peor que encuentra en su nómina.
El caso es que este año tenemos la mejor temporada posible en Inglaterra. Tan pareja, que ya nadie puede aspirar a conseguir el trébol. Acaban de echar al Manchester United de la FA Cup; Arsenal y Chelsea ya están fuera de la Copa Carling, y al Liverpool lo eliminaron de la Champions.
Hace un mes los blues pintaban para arrasar, y ahora se han desinflado tanto que, huérfanos de Drogba en enero, podrían derrumbarse. Abajo, los gunners: el segundo equipo que mejor futbol juega en Europa, y el más constante de la Premier con una nómina mucho más discreta que la de sus competidores. Y como todo apunta a fin de ciclo en unos titubeantes red devils, esta vez el título parece asunto londinense. Pero no todo queda ahí. La lucha por llegar a la Champions en una liga que nos ha acostumbrado a enviar a los cuatro embajadores de siempre, promete ser inolvidable. Mancini resucitó al Manchester City, el Liverpool antes muerto que en la Europa League dos veces seguidas; mientras Aston Villa y Tottenham trabajan para, de una vez por todas, dejarnos con la cara de what?