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Fútbol internacional Real Madrid

Leucofobia

¿Hay vida después de la muerte? ¿Quién ayudó a construir las pirámides de Egipto? ¿Qué diablos ocurre en el Triángulo de las Bermudas? ¿Quién mató a JFK? ¿Cuál es la edad de Chabelo? La vida está plagada de enigmas, pero ninguno tan intrigante como: ¿Qué hace el Real Madrid (juegue al nivel que juegue, enfrente a quien se enfrente, ocupe en la tabla la posición que ocupe) para ganar siempre en la Champions League?

No siempre fue así. Recuerdo nítidamente las primaveras transcurridas entre 2004 y 2010 como las más alegres de mi vida. Hoy es inimaginable, pero en aquellos tiempos el Madrid no pasaba de octavos. Una vez lo eliminó hasta el Arsenal. ¡¡¡El Arsenal!!!

Este año, tras pasar con el mínimo esfuerzo de siempre la fase de grupos, se encontró con un PSG al que justo a tiempo se le lesionó Neymar. Luego se topó a la peor Juventus de la década y semifinalmente, se las vio con un Bayern envejecido y hospitalizado (Neuer, Alaba, Vidal, Coman, Robben, Boateng…) 

En ediciones pasadas contó con su tradicional ración de intervenciones arbitrales y divinas, remontadas, goles en el último suspiro, sorteos favorables por si acaso… Todo un kit diseñado para pulverizar cualquier piedra que osara cruzarse en su camino a la décima, undécima, duodécima, hasta hacernos perder la cuenta de su colección de Champions. El guión cambia ligeramente pero la historia es la misma de siempre: el Madrid da risa hasta febrero y, de un día a otro, nada le sale mal. Nada.

En el partido de ayer le llegaron 12 veces a gol. En más de seis se salvaron en el área chica. Un Bayern marchito, que no le ha ganado a nadie esta temporada, con jugadores de tercer pelo como Ulreich y Rafinha, con Ribery 2018 en silla de ruedas, se las arregló para pasarle por encima y como todos los demás, acabó perdiendo aún nadie entiende cómo.

¿Cómo diantres, a estas alturas de la vida, puede haber sujetos que no odien, siquiera sientan asco por un equipo al que todo le sale bien sin tener más mérito que un escudo con forma de viejo reloj despertador bordado en el pecho? ¿Cómo hay tipos que incluso simpatizan con sus colores? He aquí el más inquietante de los misterios.