Alemania: Si se jugara en Europa ya podrían darles la Copa.
Argelia: Ondearán mejor que ningún otro la bandera del futbol colmillo.
Argentina: Vista por delante, la albiceleste está buenísima. ¡Lástima de trasero!
Australia: Hace cuatro años eran menos malos. Hace ocho, mucho mejores.
Bélgica: Su único hándicap es que se espera demasiado de ellos.
Bosnia: Crecieron entre bombas. El pánico escénico les hace los mandados.
Brasil: Maracanazo a la vista si dependen de Neymar y Óscar.
Camerún: Lo suyo, lo suyo es hacer grilla y negociar primas.
Chile: De rachas… Hoy dan pavor; en seis meses, quién sabe.
Colombia: Una de las selecciones más equilibradas del mundo. Y Falcao.
Corea del Sur: Se llaman igual, se miran igual, juegan igual, empatan igual.
Costa de Marfil: Pasaron sus mejores años, víctimas de grupos de la muerte.
Costa Rica: Demostrarán que Concacaf no es tan chafa como seguimos creyendo.
Croacia: Igual que México, se sacaron la lotería en el repechaje.
Ecuador: Único equipo sudamericano que no está para meterse en cuartos.
EEUU: Thank you, gracias, merci, dank, grazie, arigatou, xie xie, obrigado…
España: Parece que ya no son tan jodidamente buenos como antes.
Francia: El misterioso caso donde 1+1+1+1+1+1+1+1+1+1+1 no son igual a once.
Ghana: Confiable. El único africano que en 2010 dio la cara.
Grecia: Haga lo que haga, no va a amenizarnos el Mundial.
Holanda: Su generación da pena al lado de la de Bélgica.
Honduras: Podrían sumar 3 puntos… si México estuviera en su grupo.
Inglaterra: No harán el ridículo… Y eso si bien les va.
Irán: Aguerridos, testarudos, brabucones, respondones. Seguro que se parten el alma.
Italia: Los pronósticos se inventaron para poder hacer reír a Italia.
Japón: Su medio campo está a la altura de los mejores.
México: Les garantizo que volvemos al cuarto partido. Luego, no respondo.
Nigeria: Ojo: tienen a uno de los mejores porteros de Europa.
Portugal: Califican de panzazo y luego los echa España, como siempre.
Rusia: Primeros clasificados al Mundial 2018. Casi todos son unos treintañeros.
Suiza: No se merecen la cabeza de serie, pero algo traen.
Uruguay: Tienen tan poco chance de ganar como en Brasil 1950.