Dios padre para los chinos. Sabiduría andante en la mitología romana. Monstruo guardián del castillo para el resto de civilizaciones. El dragón de Portugal es todo lo anterior: sabio comprador, celoso guardián de sus arcas y monstruoso acaparador de ocho de las últimas 10 Ligas.
527 millones y medio de Euros. Suficientes para pagar dos veces la cláusula de rescisión de Lionel Messi, construir un palacio como el del Arsenal o comprar a la Juventus con estadio y jugadores incluidos. La cifra anterior no es lo que se gastaron Manchester City y Real Madrid en los últimos años, pero casi. O mejor dicho, al revés.
Se trata del dinero que ha ingresado el FC Porto en traspasos luego de ganar la Champions League 2004. En tiempos de crisis, deuda y bancarrota el Dragão prefiere que tener un equipo de futbol sea negocio.
Con la quinta parte del presupuesto del Manchester United, la rara vez que el Porto no llega a octavos de la Champions, gana la Europa League. Con una economía ajustada a la población y volumen del pequeño país donde les tocó patear un balón, los blanquiazules tienen dos orejonas en su haber: más que los capitalinos Arsenal, Chelsea, Atlético y PSG todos juntos. Si tan sólo sus jugadores regatearan en la cancha como sus directivos lo hacen en la mesa, el Porto superaría en títulos al Real Madrid.
Compraron un carnicero de nombre Pepe que les costó 2 millones de Euros y luego de disfrazarlo de futbolista pudieron sacárselo de encima a un precio de 30 millones. Se llevaron a Falcao por 5 millones y lo vendieron a 47. Anderson fue comprado en 5 y vendido a la banca del Manchester por 31.5. Hulk llegó por 19 y se fue por 55. La lista de utilidades es inacabable. Paulo Ferreira, Maniche, Bosingwa y Meireles fueron comprados en tres millones de Euros… juntaron entre todos 70 millones al salir. Compraron a Guarín en un millón y lo vendieron en 11, cobraron 16.5 millones por un Cissokho que les había costado 300 mil Euros, Lisandro López entró por 2 millones y salió por 24…
El solo hecho de que un ojeador del Porto te haya elegido significa multiplicar tus bonos en el mercado internacional. Jugar ahí equivale a obtener una beca en Harvard. Cuando te gradúes tendrás el prestigio y el talento necesarios para vender humo por el resto de tus días.
Tan buenos son para el shopping que nunca habían comprado a un futbolista mexicano. Si pagaron 6 millones de Euros por Reyes es porque le exprimirán hasta la última pluma.